google7dc024593cbc6c0f.html El Nido escondido de Filipinas

El Nido escondido de Filipinas

No tomes nada salvo fotos, no dejes nada salvo huellas, no te lleves nada salvo recuerdos, no mates nada, salvo el tiempo.


Publicado 22-11-2016



FILIPINAS

Filipinas representa un destino turístico tan atípico, por el momento, como fascinante por la cantidad de atractivos que reúne, y es que sus más de 7 mil islas dan para mucho: explorar atolones desiertos, bucear con tiburones ballena, escalar volcanes, contemplar sus verdosos arrozales, aventurarse en la selva al encuentro de tribus o descubrir megalópolis cargadas de historia.

CÓMO LLEGAR

Entre España y Filipinas no existen en la actualidad vuelos directos, así que los vuelos de los que disponemos desde Madrid con la compañía Emirates por ejemplo, son con escala en Dubai, para luego llegar a Manila.

Para llegar a El Nido, Air Swift ofrece vuelos diarios que conectan la capital filipina con esa zona. (Consulta en Viajes El mundo al revés en: info@elmundoalreves.net)

DÓNDE ALOJARTE

En Manila, existe una extraordinaria variedad de alojamientos a precios muy razonables respecto a lo que estamos acostumbrados a encontrarnos en Europa, encontrando hoteles de 4* y 5* con precios más que competitivos. En la zona de El Nido apenas hay hoteles, así que lo mejor es que elijas uno de los Resorts, localizados en las distintas islas: Miniloc, Lagen y Pangulasian.

DOCUMENTACIÓN

Si tu estancia va a ser inferior a un mes no necesitas visado. Basta con llevar el pasaporte y que éste disponga de una validez mínima de 6 meses. Es conveniente que tengas a mano una copia impresa del billete de entrada y salida del país.

EN LA MALETA

No te olvides del protector solar ni del repelente de mosquitos. Este último es muy importante para evitar el contagio del dengue y de paludismo por medio de las picaduras, infórmate de las vacunas necesarias en tu centro internacional de vacunas. Tampoco está de más que añadas un chubasquero a tu equipaje, ya que evitarás llegar empapado al desplazarte en lancha de isla a isla.

El famoso lujo asiático lo encontraremos en un idílico lugar que quizás nunca hayas oído hablar, se llama El Nido.

El Nido es un municipio que ocupa el extremo meridional de la isla de Palawan, ahí se encuentra el archipiélago de Bacuit, un lugar maravilloso para la practica del buceo y para el disfrute de playas con aguas transparentes y arena blanca. ¿Te imaginas el paraíso? estás en él.

Para soñar algunas villas de Pangulasian. Construidas a 20 metros sobre el suelo entre árboles.

Aterrizarás en el pequeño aeropuerto de El Nido, la terminal se reduce a una rudimentaria cabaña con el techo de paja, enseguida tropiezas con un cartel en el que puede leerse la siguiente inscripción en inglés:

"No tomes nada salvo fotos, no dejes nada salvo huellas, no te lleves nada salvo recuerdos, no  mates nada, salvo  el tiempo".

Cuando posteriormente accedas, a bordo de un barco, a alguna de las 45 islas desperdigadas por la bahía de Bacuit, entenderás el motivo del rótulo: esta zona perteneciente a Palawan, que a su vez forma parte del archipiélago filipino de las Visayas, sobrevive sin apenas explotar y su naturaleza se mantiene tan virgen que el simple hecho de meter una concha marina en la maleta podría interpretarse como un auténtico crimen. Y eso que Filipinas empieza a perfilarse como destino de moda para los occidentales. 

El país consta de 7.017 islas, así que las posibles paradas son infinitas: 

  • Borácay, con largas playas salpicadas de cocoteros y almendros, además de mucho ambiente para aquellos que busquen vida nocturna. 
  • Mala Pascua, donde es fácil avistar un enorme e inusual tiburón zorro
  • Bohol, con las curiosas Chocolate Hills (unas montañas que en las épocas de sequía adquieren el aspecto de bombones de chocolate gigantes) y sus monos enanos la especie de primate más pequeña del mundo.

Pero si no dispones de suficiente tiempo para ir saltando de un lugar a otro, te recomendamos que tras pasar un par de noches en Manila para recorrer la ciudad histórica, a poder ser en una típica bicicleta de bambú y visitar el magnifico Fuerte de Santiago, vueles directamente a El Nido, sin duda el destino más exclusivo y encantador de todo Filipinas. Una vez allí, tienes la opción de alojarte en el pueblo, o si lo que buscas es aislarte del mundo y disfrutar del auténtico lujo asiático, elegir uno de los complejos Resorts, existen varios y cada uno de ellos ubicado en una isla diferente: 

  • Miniloc, ideal para numerosas actividades. 
  • Lagen, perfecto si quieres organizar una boda original, pues dispone de una capilla católica al aire libre. 
  • Pangulasian, donde no sabrás si quedarte con una Beach Villa, a pie de playa privada o una Canopy Villa, construidas a casi 20 metros sobre el suelo y escondidas en impresionantes árboles tropicales. 

La mejor época para viajar a El Nido es entre los meses de Noviembre y mayo, ya que el resto del año corres un serio riesgo de encontrarte con un tifón.

Si evitas la temporada de lluvias, disfrutarás sin problemas de las excursiones en "Bangka" (La embarcación tradicional filipina) a las innumerables maravillas que alberga esta zona: 

  • Como el Big Lagos y el Small Lagos, cuyas aguas cristalinas están rodeadas de imponentes montículos rocosos y en los que puedes pasar a bordo de un kayak.
  • Snake Island, se llama así porque está unida a Palawan a través de una lengua de arena con forma de serpiente. 
  • Entalula Island en la que te sentirás todo un Robinson Crusoe, está absolutamente desierta y dormirás la siesta en una hamaca atada entre dos cocoteros sin que nada ni nadie te moleste. 
  • La Cathedral Cave, una cueva natural habitada por murciélagos que cuenta con una ventana en su parte superior por la cual entra la luz  a chorros. No olvides llevar tu equipo de snorkeling cada vez que te subas a la "Bangka" porque habrá un sinfín de ocasiones en las que tirarse al agua para disfrutar del espectáculo; Filipinas se encuentra dentro del Triángulo de Coral, la zona de mayor biodiversidad marina de la Tierra; por eso es un polo de atracción para los submarinistas y cuenta con numerosos centros de buceo repartido a lo largo de sus costas.

¿Necesitas más razones para visitar este archipiélago? Pues anota que sus habitantes son extremadamente amables y hospitalarios; haz la prueba de comentarles que te encanta su país y verás cómo esbozan una enorme sonrisa de orgullo. Además, tendrás la posibilidad de comer los más sabrosos frutos exóticos, con mención especial para el mango, que protagoniza desde ensaladas hasta cócteles con alcohol.

Otro punto a favor, es que los masajes son excepcionales y baratísimos; en concreto, la técnica local que se llama Hilot. Cuando recales en El Nido, contrata uno de esos masajes en una camilla al borde del mar, sentirás que eres la persona más afortunada del mundo por haber tenido la oportunidad de pisar la arena blanca de este paraíso olvidado.



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